Continuando mi viaje por tierras de Asterix y Obelix, en un continuo descubrimiento de monumentos megalíticos, mi asombro es grande cuando, descartada la aparente simplicidad de estos diseños arquitectónicos funerarios, leo en las explicaciones junto a ellos que, por ejemplo, la piedra superior que cubre los dólmenes pesa cantidades de kilos insoportables aún para nuestras concepciones modernas. Concretamente, la de la foto que muestro, 100 (CIEN) toneladas. Puede verse escrito en el texto que muestro debajo, con algo de dificultad debido al resplandor del Sol.
Mi pregunta es la siguiente: ¿Cómo es posible que seres humanos de esa época histórica, cuyo mayor logro tecnológico era el hacha de piedra pulimentada, con mango, pudieron mover losas como esa a fin de ponerla sobre los pilares o monolitos, asimismo de piedra, que habrían de sustentarla? MISTERIO, al menos para mí.
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