Buenos días, amigos del Mundo. Hoy es una fecha importante, una de esas fechas en las que el tiempo, que viene corriendo como un caballo desbocado desde mucho antes de los bisontes de Altamira, es decir, desde tiempos inmemoriales, parece detenerse un segundo para cambiar de dirección. Pero basta ese segundo para hacer memoria del pasado y afrontar un nuevo futuro. Desde donde yo estoy la mañana es luminosa, y desde aquí quiero desearte, si el tiempo te ha hecho ese guiño antes de seguir adelante, un largo camino todavía lleno de hallazgos y placeres, de cosquillas en el estómago y en el cerebro, de nuevas admiraciones ante las maravillas de la Naturaleza, de una curiosidad insaciable que te procure grandes descubrimientos cuando ya no los esperabas...
El poema que reproduzco a continuación lo leí en público cuando ese segundo se posó sobre mí. El otro, de Petrarca, habla del correr desalentado tras una Amada que nunca se deja alcanzar.
Hoy estoy melancólico, disculpadme...
"Son blancos los cabellos que hace bien poco eran negros. Miras al tiempo, y él te mira: no hay mucho que decir". José Cereijo
"Mi loco afán está tan
extraviado de seguir
a la que huye tan
resuelta, y de lazos de
Amor ligera y suelta
vuela ante mi correr
desalentado".
Petrarca
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